Tras un año y un mes de haber iniciado este camino, desde el diagnóstico de depresión y síndrome ansioso, y los primeros ataques de ansiedad, aún me encuentro buscando la salida. Meses de pastillas, psicologo, psiquiatra, aislarme por sentirme mal, subir de peso por las pastillas y tolerar comentarios sobre mi cuerpo. Aún sigo buscándome. Últimamente me he encontra conmigo misma por breves momentos, como si detrás de tanta carga, estuviera la persona que fui siempre, esperando sanar para ir apareciendo de a poco.
Si no te sientes tú ahora, si la tristeza ha llenado tus días últimamente, no te rindas, tu esencia sigue siendo la misma, solo es una etapa difícil.
Dicen, quienes han pasado ya por esto, que este malestar desaparece, que vieron la luz al final del arcoiris.
Yo, sin embargo, mientras tanto me aferro a mi felicidad de minutos, mi frágil estado de ánimo y la esperanza de que mi vida vuelva a llenarse de vida.
Para los que vamos un día a la vez, hoy no es el día de rendirnos.