Al inicio mi ansiedad no me molestaba, era general, normal, tras varios eventos algo ‘traumáticos’ se detonó, como bomba, se descontrolo tanto que mi día a día era como una pesadilla, el pánico, miedo, todo me empezó afectar. Mi vida era un caos, total desorden, a tal punto que la depresión se apoderó de mi. No quería hablar con nadie, mi peso también se descontrolo, pero nadie lo vio alarmante, pensaron que era por vanidad y yo tampoco le di importancia.
Todo esto lleva años y después de tanta porquería, entre en paz, no se como o cuando, pero un día decidí empezar a prestarle más atención a mis problemas, quería un cambio, poder controlar mi desequilibrio.
La meditación se volvió rutina diaria en mi vida, las respiraciones y tomarme el tiempo de tratar de controlar mis pensamientos y mi cuerpo, ayudaron mucho, logre tener un peso estable.
Lastimosamente volví a tener una caída, regresaron los recuerdos de varios eventos y pasaron más cosas últimamente, no he podido parar de llorar y sentirme ahogada. Esta cuarentena también me está destrozando, me trae un pánico horrible, pero ayer me acerqué a mis padres y por fin les conté sobre uno de mis ‘traumáticos’ eventos. Tuve todo su apoyo y puedo decir que el día de ayer fue gran logro para mi, un peso menos.
Pero estoy dando lo todo, para que esto no vaya para largo.
Para esa persona que esté leyendo esto, quiero decirle que; no estás solo, no hay mal que por bien no venga, y puede que te sientas que ya no das más, pero créeme que tienes apoyo, solo tienes que buscarlo o solito llegará, no te preocupes, que todo se puede!
