Hola a todxs. He pensado mucho si hacer o no este post dado que la idea es darnos ánimos y no sugestionarnos con las malas noticias. Pero luego de tanto pensar, también creo que es justo que se sepa la verdad de cada caso para luego decidir con más información.
Recuerdo la situación: a mi padre le diagnosticaron cáncer de vejiga de alto grado infiltrativo de detrusor en junio de 2020. Entre agosto y diciembre de 2020 hizo quimioterapia y radioterapia, que le dejaron secuelas bastatne importantes. Las revisiones de febrero, julio y septiembre de 2021 (tomografía y cistoscopía) dieron muy bien. La tomografía de enero de 2022 también dio bien y estábamos todos muy contentos.
Lamentablemente no hizo el control de cistoscopía que le hubiera tocado entre marzo y abril y los primeros días de junio de 2022 comenzó de nuevo con abundante sangrado en orina. Muy muy abundante. Se trataba de una recidiva del tumor, volvieron a hacerle RTU, sacaron el tumor (no era demasiado grande) y comenzó tratamiento con pembrolizumab, un monoclonal que forma parte de un tratamiento inmunológico. ESte tratamiento demoró dos meses en comenzar debido a que tuvo infecciones urinarias a repetición y una internación más por hiponatremia. Se deterioró muy muy rápidamente.
A pesar de haber realizado 4 aplicaciones de pembrolizumab, y de que nos habían dicho que este tratamiento tenía una tasa de éxito mayor al 65%, en diciembre en el control de resonancia salió que tenía metástasis prácticamente en todos los órganos: hígado, riñones, estómago, suprarrenales, etc. Se fue apagando lentamente y el 4 de enero murió en su casa rodeado de todos nosotros.
Lo único que me sigue doliendo muchísimo es saber que tuvo conciencia de que se estaba muriendo y de que ya no podíamos hacer nada al respecto. Fue muy triste pero lo acompañamos con amor hasta el final.
Por suerte la mayoría de los tumores de vejiga no terminan de este modo, pero mi consejo es que no dejen de hacerse los controles. No sé si hubiera sido diferente el desenlace de haber tomado la reaparición del tumor más a tiempo, pero siempre me quedará esa duda.
Gracias por vuestra compañía y les deseo salud y curación a todxs.
Abrazos,
Lucía