La psoriasis en niños suele ser una molestia menor, pero en ocasiones puede ser más grave. ¿Qué implica para un niño tener psoriasis? ¿Qué podemos hacer para aliviar los síntomas?
En la mayoría de los niños, la psoriasis se limita a la aparición de unas pocas manchas, y suelen responder bien al tratamiento. Los casos más graves podrían requerir medidas más agresivas. La buena noticia es que existen muchas alternativas
¿Qué es la psoriasis?
Se trata de una enfermedad no contagiosa, aunque sí puede ser hereditaria, que hace que se acumulen células dérmicas en la superficie de la piel, y produce manchas rojas que provocan comezón (placas) y escamas gruesas. Puede manifestarse en cualquier parte del cuerpo, pero se localiza con más frecuencia en el cuero cabelludo, las rodillas, los codos y el torso. Es más probable que la padezcan los hombres que las mujeres, y si bien puede aparecer a cualquier edad, suele hacerlo entre los 15 y los 35 años.
La psoriasis es una enfermedad crónica que aparentemente puede mejorar o empeorar de forma aleatoria. Puede desaparecer completamente y reaparecer de forma repentina.
Para muchos niños la psoriasis es sólo una pequeña molestia, pero para otros puede ser más grave. Algunos de los que la padecen pueden sentirse avergonzados, hecho que les puede provocar baja autoestima e incluso depresión.
Actualmente no existe cura para la psoriasis, pero sí remedios para tratar los síntomas. Cambios en el estilo de vida, como mantener una dieta y un peso saludables, también pueden ayudar a aliviar los síntomas.
¿Cuáles son las causas?
La causa exacta no se conoce con total seguridad, pero sí los mecanismos de la enfermedad. Se trata de una afección autoinmune, en la que los linfocitos T (un tipo de glóbulos blancos) atacan la piel sana como si trataran de combatir una infección o curar una herida.
Las células de la piel suelen tardar alrededor de un mes en llegar a la superficie, donde luego mueren y se recambian. La psoriasis hace que los linfocitos T ataquen la piel sana, y provoca que las células de la piel lleguen a la superficie en unos pocos días en lugar de un mes. La piel muerta no se puede eliminar con la rapidez suficiente y se acumula en la superficie en forma de manchas gruesas y rojas.
Por lo general, el diagnóstico de la psoriasis es bastante sencillo. El médico examinará la piel, el cuero cabelludo y las uñas del niño y hará preguntas al niño y al adulto que le acompaña sobre antecedentes familiares, enfermedades que haya sufrido el niño o qué medicamentos toma.
En casos excepcionales, es posible que el médico tome una pequeña muestra de piel (biopsia) para examinarla con mayor detalle. La biopsia permite que los médicos determinen si una persona tiene psoriasis u otra enfermedad con síntomas similares.
¿Cuál es el tratamiento contra la psoriasis?
Existen muchas formas de tratar la psoriasis, y la efectividad de cada tratamiento varía de una persona a otra.
Se clasifican en tres categorías:
Tratamientos tópicos: Se emplean cremas, lociones y ungüentos que se aplican directamente sobre la piel. nuestra recomendación en niños es utilizar un tratamiento natural ha que un tratamiento a base de corticoide, alquitran es muy agresivo y puede llevar a tener un efecto secundario
Fototerapia: Consiste en la exposición a luz ultravioleta natural o artificial para el tratamiento de los síntomas no se recomienda en niños porque puede perjudicar llevando a una psoriasis pustulosa infectada
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Medicamentos orales o inyectables: Se utilizan para el tratamiento de psoriasis severa u otros tipos de psoriasis que no responden a otros tratamientos. Incluyen píldoras, inyecciones y medicamentos administrados en forma endovenosa. no se recomienda en niños por ser muy agresivo
¿Qué puedes hacer en casa para reducir los síntomas de la psoriasis?
Además de seguir las instrucciones del médico, puedes ayudar al niño a elegir un estilo de vida saludable:
Dale alimentos sanos. Comer muchas frutas y verduras puede ayudarlo a evitar enfermedades que desencadenan la psoriasis.
Ayuda a tu hijo a mantener un peso saludable, así disminuye el riesgo de psoriasis invertida.
Recuérdale que mantenga su piel limpia y bien humectada. Los baños diarios con sales de baño o aceites y la aplicación posterior de un humectante pueden ayudarlo a aliviar los síntomas de la psoriasis.
Pasa tiempo con el niño al aire libre. La exposición breve a la luz natural puede ayudar a mejorar la psoriasis.
Dale apoyo emocional a tu hijo. La conversación con un terapeuta o la incorporación a un grupo de apoyo formado por personas que comprendan los desafíos que presenta la psoriasis pueden ser beneficiosos para muchos niños que sufren problemas emocionales debido a la psoriasis.
La mayoría de los casos de psoriasis responden bien al tratamiento, pero es importante respetarlo de forma estricta.
Si tu hijo debe aplicarse ungüento dos veces por día, recuérdale que debe hacerlo; si el médico recomienda que debe exponerse un poco más al sol, acompaña a tu hijo a caminar diariamente. Tus esfuerzos, en combinación con los de tu hijo, lo ayudarán a controlar los síntomas de la psoriasis.